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El CAPA atiende adultos por abuso y dependencia de drogas; menores es solo prevención

Les enseñan lo negativo de las sustancias para reforzar lo positivo de sus vidas

Esteban Villalobos

lunes, 28 octubre 2019 | 20:21

Parral.- En el CAPA a los menores de edad se les atiende de manera preventiva, pues son quienes han utilizado alguna droga por uso recreativo, sin embargo, los adultos de los 28 a 40 años de edad son quienes acuden en busca de ayuda, pero es por abuso y dependencia de drogas.

La coordinadora del Centro de Atención Primaria a las Adicciones (CAPA) Sol Adriana Sánchez García descartó la atención a menores de edad a través del Centro pues solo se les previene sobre las consecuencias de las adicciones para que se abstengan de darle un uso recreativo a las sustancias.

Explico que esto sucede cuando en muchas de las ocasiones los menores de edad se dejan guiar por información de pares, es decir otros menores, pues ven la información como algo fidedigno, toda vez que la percepción hacia los adultos es que no quieren que se diviertan.

“Nosotros nos enfocamos a las consecuencias negativas del consumo para poder reforzar lo positivo en su vida”, resaltó la entrevistada.

Por lo anterior, puntualizó, problemas de adicción entre menores no se han atendido en el CAPA, pues la adicción, explicó, se divide en tres etapas que son: uso, abuso y dependencia o adicción y entre los menores generalmente hay un uso experimental solamente y son los que se atienden por lo que realmente la población que acude en busca de ayuda va de los 29 a los 40 años de edad que se encuentran dentro del abuso y dependencia de drogas.

Cuestionada sobre la prevención que se brinda a los menores manifestó que esta no necesariamente se brinda en los centros escolares, que sí se da, pero también hay casos en los que los papas los identifican porque los notan raros, tan raros, que buscan ayuda para saber que está pasando.

Por ello se recomienda a los padres de familia observar a sus hijos y ante cualquier situación de alerta buscar ayuda.

De igual forma descarto que esta situación se de en algún estrato social determinado, las drogas no tienen preferencia en ese sentido, más bien, refirió, se trata de disponibilidad de tiempo y dinero; en general es la búsqueda de una identidad en la adolescencia y no se tiene los espacios necesarios para poder adquirirla.

Finalmente, manifestó que se ha comprobado que la persona que convive con más grupos sociales está mucho más protegida, es decir, mantiene su tiempo ocupado y con diferentes círculos sociales, lo cual no le permite enfocarse con ciertas personas ya que tiene un panorama más amplio, incluso el círculo religioso hace la diferencia.