Francisco Cisneros

Parral.- En crisis aserraderos de Chihuahua y Durango, ante cambio de gobierno federal, contracción del mercado y falta de obra pública, ocasionado el cierre parcial o total de algunas empresas, mientras que otras subsisten únicamente efectuando recorte de personal, afectando severamente la economía de cientos de familias que habitan en localidades serranas, ocasionando que abandonen sus tierras o formen parte de las filas del crimen organizado.

El presidente del Comisariado del Ejido Catedral de Guadalupe y Calvo, Javier Portillo Mares, declaró que el año 2019, fue muy difícil para el sector maderero, ya que asegura que la economía se encuentra estrecha, ocasionando incertidumbre de las grandes industrias a nivel nacional.

Explicó que la situación es en la generalidad de los aserraderos que se ubican en el estado de Chihuahua y Durango, precisando que los de mayor escala efectuaron a recortar personal, mientras que las empresas mas pequeñas, tuvieron que cerrera de manera parcial o totalmente.

“Entre los mismos presentantes cuando se efectúan las reuniones se escucha que cierto productor ya paró su producción, mientras que otros se están sosteniendo, pero con la queja que no existe una pronta recuperación del dinero y no hay el desplazamiento de recurso que existía anteriormente”, señaló.  

Manifestó que el recorte de personal, ha goleado severamente la económica de cientos de familias, situación la cual se torna difícil durante las fechas decembrina, ya que se incrementan los gastos, al tener la necesidad de comprar ropa de temporada o medicamentos para las enfermedades.

Portillo Mares mencionó que en la sierra existen pocas alternativas de trabajo y ante la falta del mismo, las personas se ven orilladas a abandonar sus tierras o como último recurso, se unen a las filas del crimen organizado y comienzan a asaltar o robar.