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La navidad es un misterio que se llama Jesucristo, no regalos: Ortega

Invita párroco a tener actitud espiritual no materialista durante esta época

Francisco Cisneros

domingo, 15 diciembre 2019 | 16:38

Parral.- El párroco César Alfonso Ortega, emitió un mensaje dentro de la temporada decembrina, donde recordó que estamos atravesando por un periodo de adviento en preparación espiritual a la navidad, donde se nos invita a abrir nuestros corazones a Dios y tener una actitud espiritual, no una actitud materialista, donde comúnmente nos dejamos llevar por el consumismo y por los regalos.

“No hay que dejarnos llevar por las cosas materiales y sólo pensar en regalos, cuando el regalo más grande es Jesucristo y si encuentro con nosotros” añadió el padre, a la par de enfatizar que en estos días es común ver a las personas desbordándose y desgastándose comprando cosas materiales, que finalmente quedan fuera del objetivo de estas fechas.

Asimismo, Ortega, detalló que generalmente la ciudadanía se sumerge a un mundo de ruido y distracciones que desvían de la navidad en su concepto más puro, el cual corresponde a una persona, a un misterio y este se llama Jesucristo, y no las cosas, por eso debemos prepararnos internamente para hacer de nuestros corazones un pesebre, donde Jesús se interne, según indicó.

“Hay que hacer de nuestro corazón un pesebre humilde y unido, listo para que Jesús se quede dentro”, añadió, y posterior manifestó que en el caso de la ciudadanía que no comulgue con el catolicismo, debe igualmente de adoptar a la navidad como un tiempo de oración y recogimiento y para acoger los regalos que no enseña Jesucristo.

“Paz, esperanza, amor y fe, son os reglas que debemos esperar para estas épocas” según añadió, sin embargo enfatizó en qué hay ocasiones en donde se pierde el sentido de la navidad y lo que significa este tiempo, ganando tristeza, vacío interno y des esperanza, quedando desorientados, por lo que nuestra atención y mirada debe estar referenciada a lo espiritual, ya que todo lo demás pasa, se agota y nos deja la sensación de vacío interior, según concluyó.