Francisco Cisneros

Parral.- 

Los vendedores ambulantes que arribaron a esta ciudad para conformar la tradicional “Feria del hueso” llegaron desde el pasado 28 de octubre y tras 9 días de instalados, reportan malas ventas y daños en la mercancía por repentinas lluvias en días pasados, “hay decepción” señalan locatarios.

Primero la riada del pasado domingo, donde el granizo y la intensa lluvia dañaron algunos locales y mojaron las cobijas de quienes se dedican a este comercio y posterior el reporte de las malas ventas, fue la conclusión de la mayoría de los comerciantes para esta edición de la feria del hueso, donde según destacaron pensarían en no acudir el próximo año.

Es el caso de David, un comerciante originario de Durango, quien se dedica a la venta de textiles, manifestó que tras pagar al municipio 1,800 pesos por los días en que se le permitió estar instalado a un costado del Panteón de Dolores, estaría pensando seriamente en no regresar el próximo año, ya que la economía “está difícil” y se reflejó en la cantidad de prendas vendidas.

Por otro lado los locatarios que venden cobertores y artículos de cama, tuvieron que tender sus mercancías a lo largo de estos últimos días sobre las barreras de contención, ya que la lluvia del domingo y los pequeños chubascos que se han registrado, mojaron su mercancía y no ha logrado secarse en su totalidad, lo cual significó pérdidas para ellos, de acuerdo a lo señalado.

En tanto, los comerciantes de importaciones, reportaron una disminución considerable en sus ventas, en el caso de María José, una de las locatarias, detalló que no alcanzó la venta siquiera del 50 por ciento en comparación del año anterior y lo adjudicó a la economía general, ya que continuamente ha viajado por distintas ferias y en todos los lugares de observa la misma situación.