Francisco Cisneros

Parral.- De acuerdo con el Colegio de Psicólogos, los comportamientos adictivos a los teléfonos inteligentes, podrían estar relacionados con otros problemas, como el estrés y el estado de ánimo deprimido.

Trastornos mentales como la depresión, ansiedad, estrés, mala calidad del sueño o baja rendición académica han ido en aumento en adolescentes y jóvenes por la adicción al uso teléfonos inteligentes, reveló Jesús Ismael Ramírez Guerrero, del Colegio del Desarrollo Integral del Psicólogo en Saltillo, Coahuila, durante su estancia en Parral.

El especialista señaló que las investigaciones sobre el tema están centradas en el “uso problemático de teléfonos inteligentes” y que, alrededor del mundo se han analizado 41 estudios diferentes aplicados a 42 mil jóvenes de todas las nacionalidades en los últimos nueve años, "desde 2011 para ser específicos, los cuales han sido determinantes para asegurar que el 23 por ciento tiene ansiedad al no poder usar su teléfono o no poder moderar el tiempo dedicado a su uso", detalló

"Tal comportamiento adictivo podría estar relacionado con otros problemas, como el estrés, el estado de ánimo deprimido, la falta de sueño y la reducción del rendimiento en la escuela", abundó.

Los estudios a los que hace referencia el psicólogo, admiten que ha habido una prevalencia en la investigación sobre el uso problemático de teléfonos inteligentes en niños y jóvenes y cómo este síndrome se relaciona con los resultados de salud mental, sin embrago ninguno ha evaluado de manera crítica los efectos.

"Los teléfonos inteligentes llegaron para quedarse y es necesario comprender la prevalencia de su uso problemático. Sin embargo, aunque no se ha logrado determinar si la adicción al uso de un smartphone en sí mismo o las aplicaciones que se usan están directamente relacionadas con los problemas de salud mental, existe una necesidad de conciencia pública para mediar su uso, principalmente en niños y jóvenes", sentenció.